martes, 17 de febrero de 2009

La fidelidad de Rosita

Una canción sonaba en la calle, en noche estrellada. La melodía un recuerdo hiriente, la misma que escuchó al despedirse de Camilo “bésame mucho” . No eran buenos tiempos para el amor recordó, necesidad y ruina se turnaban para agobiarlos, demasiado jóvenes apenas contaban veinte años. Hubo lágrimas, hubo dolor se cimentaron promesas.

Muchos años pasaron desde aquella tarde en la que bailaron ese bolero de amor, jurándose una fidelidad eterna. Rosita no supo más de él en quince años . Trabajó tenazmente para mantener la casa. Los amantes se sucedieron para combatir el frío de la soledad . Más nunca amó a ninguno, su corazón permaneció fiel a Camilo.

Estaba herida de muerte, respiraba agitada tumbada en la cama , las lágrimas corrían como las nubes negras, repasaba los años vacíos de espera, llenos de desesperación. Uno a uno sus sueños fueron esfumándose, aferrada siempre a la esperanza de volverlo a ver. Esa última noche volvía desde el pasado, hicieron el amor y él aseguró que nunca la olvidaría y regresaría pronto.

Se levantó, temblaba, los suspiros la invadieron, abrió la ventana. Una orquesta era la que tocaba “Bésame mucho”, la gente curiosa se agolpaba tras ella. De repente una sombra emergió de la oscuridad. Era Camilo. Ella sobresaltada le gritó “ Nunca me fui de nuestra casa , sabía que volverías“

Y fue tanta la embriaguez de amor que la oprimía, que asomó más de medio cuerpo por la ventana; sus manos lo saludaban efusivamente , su boca se llenaba de besos dulces , mientras sus ojos lloraban todo ese amor retenido en un corazón callado. En un segundo de descuido perdió el equilibrio y su cuerpo sin oponer resistencia voló precipitándose al vacío. La gente trasmutó el gesto de júbilo y gozo por el de consternación, sólo pudieron protegerse de ese cuerpo que se avecinaba desde un quinto piso.

-No te mueras-le susurró Camilo-
- ¡Perdóname Rosita! Le suplicó mientras cubría su boca de besos apasionados.
-No, no llores, al fin vivo- sólo eso pudo contestarle.

Autora: Techum

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