Payasos que no saben reír,
niños que no saben jugar,
parejas que no pueden besar,
luz que no quiere brillar,
luna que no quiere amar,
mar que no quiere de perlas
las playas sembrar,
océanos que de ilusión no quieren
a los navegantes dar.
Sonrisas apagadas,
labios atados,
manos en bolsillos pegadas,
y mientras murmulla y murmullan,
cotillas vacías sombras,
oscuro,
lo que por Valladolid asola,
es la infelicidad,
la amargura,
la melancolía.
Que entre edificios vacíos,
cristales rotos se oculta,
de fontanas apaga la sed,
de el viento calma al silencio.
Esperando una oportunidad,
mientras impotente,
escucho,
como el corazón,
viento desesperanzador,
asola.
Tormenta del alma,
pensamientos,
dolor.
Paz,
calma,
soledad.
...
Autor: Alexander Rol
Hace 3 semanas
Buen poema...
ResponderEliminarNavegando sobre el mar del tiempo;
A la deriva nos hemos encontrado
Expectantes de la ruta que tomamos
Avariciosos, hambrientos de poder desfallecemos
Ignorando señas evidentes
Que marcadas con sangres y tristeza
Auguraban, terror; futuro incierto
Continuamos, por aguas turbulentas
No miramos; cegados por placeres
El sufrir de algunos tan ajenos,
Que con hambre, dolor y sin deberlo
Vivieron la avaricia de otros seres
Sin sentido en mil guerras peleamos;
Buscando de plata enriquecernos
Desgastando, la vida, el amor; esos valores
De importancia, lo poco y grandioso que tenemos
¡OH que grande es el mundo en que vivimos!
Por que tan grande es del hombre su existencia
Que ha creado confort y conveniencia
Sin pensar en futuras consecuencias
Ese virus; que enfermo deja al mundo
Decadentes a los nuevos habitantes
Que mirando de frente a su futuro;
Se advierten desarmados; titubeantes
¡Cual fácil debería de ser la vida!
Con tantas ventajas aparentes
Que tal vez, facilitan la existencia
Pero al alma la dejan decadente
El pasado, cerca y lejano yace;
En el mar de la historia se aleja lentamente
Dejando un presente diferente
Tan distinto y sin fijo antecedente
Y buscando los jóvenes actuales
De esta nave, los nuevos tripulantes
Un camino de luz; un nuevo fuerte
Se pierden por caminos diferentes
Y es que hay tantos engaños y mentiras
Que atraen con sutiles seducciones
Envenenan el alma y quitan vida
Que destruyen las nuevas ilusiones
Pero ¡OH de aquellos que salen victoriosos!
Al pecado, desden y tentaciones
Que de ellos será la gloria eterna,
El amor de la gente y sus clamores
Y que falta nos hacen esos hombres
Que aunque mil veces fueran ya tentados
Continúan, con celo enamorados
Del valor, la lucha y el esfuerzo acompañados
Tantas cosas, por los años han cambiado
La visión, el orden y el vivir se han reformado
Muchas cosas quizás han decrecido
Mas el espíritu de algunos jamás ha perecido.
Y con estos al frente;
Continuamos navegando...
me recordo a este poema que hice ya hace tiempo...